VIOLETA PARRA
Violeta del Carmen Parra Sandoval, entre cantos,
poesía, sones y pasiones se transformó enamoradamente en nuestra querida
VIOLETA PARRA, hermana de Nicanor y madre de Ángel e Isabel. Savia de juglares
que junto a Víctor Jara, Patricio Manns, Los Quilapayún, Inti Illimani y tantos
otros supieron cantarle a la esperanza del hombre nuevo nacido de las entrañas
del Chile mineral, de los valles verdes de los Andes y de la valiente alegría de
los estudiantes. En VIOLETA la
fascinación no se agota en su obra, vinculada a lo más sentido y querido del
folclore y la canción popular. Es fundamentalmente su trayectoria humana el
paradigma de la odisea de la mujer latinoamericana por conquistar un espacio en
la sociedad, tanto en lo relativo a la esfera personal, en lo político, y
fundamentalmente en lo intelectual. Al reconocimiento de su rol precursor en el
desarrollo de la llamada “Nueva Canción”, se ha ido agregando en los últimos
años una actitud de comprensión admirativa hacia el temple contestatario con el
que enfrentó los dilemas del mundo que le tocó vivir; caracterizando esa
inclaudicable impronta personal como una conducta combativa e ideológicamente
coherente en el hacer y en el decir. Su desarrollo como artista se inserta
paradigmáticamente, recorriendo el periplo que ha caracterizado a los artistas
populares latinoamericanos, en los circuitos marginales de provincia y de los
barrios urbanos. Y así, la encontramos incansable dando y recibiendo vida en
peñas, plazas y mercados. Recitales improvisados donde las gentes se
transforman en muchas voces que entonan una sola canción. Es Nicanor Parra, el
hermano, el cantautor, quién ve en VIOLETA la mejor opción para acometer la
empresa de rescatar la esencia del canto popular de profunda raigambre obrera y
campesina. VIOLETA posee una sensibilidad casi ingenua y sobre todo un talento
natural de sentir en la piel los dones del amor. Es en esa tarea que VIOLETA
asume su tarea de recopiladora del folclore chileno y sus raíces, insertándose
vivencialmente en el proceso cultural en el cual se entretejen y reproducen
prácticas de vida, formas de comportamiento social, actitudes frente al amor,
al trabajo, al engaño y al desengaño. Su proyecto mayor, ya internacionalmente
reconocida y aplaudida, fue la instalación de una gran carpa en la zona
santiaguina de La Reina, orientada al logro de la creación de una particular
universidad de la cultura popular, que incluía cursos de folclore, de
composición musical, artesanía, danza y cocina autóctona. Allí, “La Peña de los
Parra” se convertiría rápidamente -a partir del triunfo de la revolución cubana
que estimula un entusiasta proceso de reformulación y cambios políticos del
continente, y de revalorización de las expresiones culturales populares-, en el
punto de reunión y espectáculo de las mejores voces latinoamericanas. Por
primera vez la “Nueva Trova” sale de la Habana para recorrer con su canto
libertario, de las manos de los Parra, las floridas sendas de La Alameda. En el
periodo que va desde 1961 a 1967, el año de su muerte, VIOLETA PARRA produce su
obra más personal y distintiva. “Gracias a la vida” y “Volver a los 17”, se
transformaría con el correr del tiempo en su legado para las futuras
generaciones que hoy reconocen en ella y en su obra la entidad de Gabriela
Mistral y la continuidad poética de Pablo Neruda.
miércoles, 13 de noviembre de 2013
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